El Tabernáculo -5

El Arco - Parte 3


Por: Brad Scott
De: WildBranch Ministry

Traducido por: María E. Figueroa

Bueno, mentí. Todavía no he terminado con el arca. Este tema es demasiado importante y no quiero dejar afuera un montón de cosas buenas sólo por el hecho de avanzar. Así es que, con esto en mente, hablemos algo más acerca de los querubines y el contenido del aron. La última vez, hablamos brevemente acerca del propósito que tienen los querubines para estar ahí, pero el texto nos da algunos detalles más del diseño estructural, el cual es importante. En Sh'mot capítulo 25 versos 19-20, se nos dice que estos seres especiales tienen que cubrir el kapporet con sus alas extendidas hacia el frente. Las alas hablan notoriamente acerca de la confianza en las Escrituras.

Mizmor (Salmos) 61:4 "Yo habitaré en tu tabernáculo para siempre; Estaré seguro bajo la cubierta de tus ALAS. Selah"

Mizmor 36:7 "¡Cuán preciosa, oh Dios, es tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se amparan bajo la sombra de tus ALAS."

Mizmor 91:4
"Con sus plumas te cubrirá, Y debajo de sus ALAS estarás seguro; Escudo y adarga es su verdad."

Escuchen cuidadosamente al escritor del libro de Rut, capítulo 2 verso 12: "YHVH recompense tu obra, y tu remuneración sea cumplida de parte de Yhvh Dios de Israel, bajo cuyas alas has venido a refugiarte." Estos querubines ilustran el acto de batach o confiar en el Señor. Muchas veces en las Escrituras la confianza es asociada con los niños. En Mattityahu (Mateo) 18:3, Yeshúa dice, "De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos." Los niños son la personificación de la confianza. Ellos dependen totalmente de la sabiduría, la nutrición y la dirección de su madre y padre. Entonces no es coincidencia que en la literatura Rabínica los querubines son ilustrados con caras de niños pequeños, revoloteando sobre el arca que contiene las instrucciones de nuestro Padre. La Palabra de Dios está "bajo la sombra de sus alas."

El arca contiene o contendrá tres objetos. La ley - (Los Diez Mandamientos) Devarim (Deuteronomio) 10:2; la vara de Aarón - B'midbar (Números) 17:1; y la olla del maná, Ivrim (Hebreos) 9:4. Todos estos tres objetos son parte del testimonio del Señor así como el mismo tabernáculo (B'midbar 9:15). Sin embargo, específicamente el arca es el testimonio de Dios. Así es que, ¿Cuál es el testimonio de Dios? Bueno, esta palabra Española es traducida a menudo como "el testigo". En el Hebreo, la palabra es 'edut. Este arca tenía que ser el testigo de Dios. Este arca, un accesorio en singular, son las instrucciones de Dios cubiertas por Su misericordia. Este es Su testigo de Su carácter y naturaleza. Muchas veces, cuando TESTIFICAMOS Sus buenas nuevas, nos enfocamos sólo en el kapporet o misericordia, y no del resto del testimonio. Yeshúa testificó de Su Padre al extender misericordia y gracia a mucha gente y al obedecer Sus mandamientos. Este es una perfecta ilustración continua de un testigo de Dios, no un hombre. Los tres objetos en el arca todos testifican del camino, la verdad y la vida de Dios. En B'midbar 17, vemos que la verdadera VIDA es expresada en los capullos reverdecidos de la vara de Aarón. Vemos la ilustración del Sumo Sacerdote siendo el único CAMINO hacia el Lugar Santísimo y experimentamos la VERDAD a través de la revelación de la única y verdadera vara de Dios, aquella que produce frutos. A pesar de la clase de comida que Israel codició, la única forma en que ellos podían ser alimentados por Dios era comiendo de Su maná o Su pan. Este pan era una ilustración de la verdadera VIDA de Dios. "Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da VIDA al mundo." Yochanan 6:33. El verso 32 de este mismo capítulo nos dice que este maná es una ilustración del VERDADERO pan que viene del cielo. El maná fue siempre un yad o el indicador de las palabras de Dios. "Y te afligió, y te hizo tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido, para hacerte saber que no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de YHVH vivirá el hombre." D'varim 8:3. Los Diez Mandamientos, una representación de todos los mandamientos de Dios, son también un testigo del camino, la verdad y la vida de Dios. Mizmor 119:1 dice, "Bienaventurados los perfectos de camino, Los que andan en la ley de YHVH.". Mizmor 119:50 dice "Ella es mi consuelo en mi aflicción, porque tu dicho me ha vivificado.". Yeshúa expresa esto perfectamente bien cuando dice en Yochanan 6:63, "El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida ". En Mizmor 119:142, 151 de nuevo leemos, "Tu justicia es justicia eterna, Y tu ley la verdad ... Cercano estás tú, oh YHVH, Y todos tus mandamientos son verdad". Para más estudios sobre esto, yo les recomiendo que vayan a nuestros archivos bajo este asunto. Les puedo asegurar que hay múltiples versos similares a estos.

Yo creo que el corazón es donde la Torá de Dios reside, y eso siempre ha sido de esa forma. Muchos escolares bíblicos enseñan que Mesopotamia es la cuna y el corazón de la civilización, y que el jardín del Edén estaba en el corazón de Mesopotamia. Las escrituras proceden a revelar que del corazón de esta tierra había cuatro ríos que salían del Edén para regar el jardín. (B'reshiyth (Génesis) 2:10). Esto, por supuesto, sería la fuente de agua que le daría vida al jardín y una ilustración de la fuente de agua viva. "El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva." Yochanan 7:38. Fue en este jardín que Dios le dio a Adán instrucciones o la Torá. A Adán se le dijo que él podía comer libremente de todos los árboles del jardín. El jardín era el mundo de Adán, y a él se le dio libertad en ese mundo si él obedecía el mandamiento de Dios. "mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.". B'reshiyth 2:17. Instrucciones bastante sencillas. Haz lo que te pido y tu tendrás libertad, desobedece y tu perderás tu libertad y tu vida. Desde el corazón y el centro del mundo de Adán viene la libertad si él escucha a Dios y la muerte si él no lo obedece. La libertad no viene de la liberación de las instrucciones de Dios sino de la obediencia a ella. En B'reshiyth capítulo tres, la serpiente contradecirá esta verdad básica de la Biblia y enseña que la libertad viene de la liberación de los mandamientos de Dios. Esta perversión de una verdad básica bíblica será la base para la mayoría de las religiones desde este punto en adelante. Después que Adán y Chava (Eva) fueron removidos del jardín, este antiguo paraíso desaparecería de la escena. Desde este punto en adelante, el jardín será colocado en los corazones de los hombres por el acto de sacrificio de sangre inocente. Toda persona desde Adán no puede entrar a este jardín. La verdad de Dios, por fe, habitaría con nosotros, y algún día nosotros una vez más estaremos donde Él está. Yochanan 14:3

Dios, una vez más pintaría una ilustración de Su lugar de habitación en el tabernáculo. Un lugar para Su misericordia e instrucciones, el arca. Este tabernáculo en el desierto para Su pueblo tendría un corazón o fuente de los ríos de Dios para dar vida. Sería el corazón de esta estructura la que daría instrucciones y vida al Santo lugar y los atrios. Aquí será donde Dios tiene que comenzar primero, y por esto, desde el punto de vista de Dios, Él comienza aquí. El corazón o el lev en Hebreo es el centro del hombre. Algunas veces se le refiere como el vientre o beten. La raíz verbal de esta palabra también significa salir fuera del centro. El beten o el vientre es la fuente de nutrición para el niño. Las Escrituras enseñan que lo que vemos externamente viene del mismo centro de nuestro ser, o nuestro corazón. "!!Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca." Mattityahu 12:34. Si el corazón no contiene las palabras de Dios, entonces las palabras de Dios no serán mostradas. Cuando nosotros, como creyentes, recibimos un nuevo corazón, nosotros tenemos Su Torá escrito allí. ¿Por qué? Porque Dios está colocando Su arca en el centro de nuestro mismo ser. Un arca que esta cubierta por Su misericordia pero que contiene Sus leyes. Sus leyes tienen que estar escritas en nuestro corazón. Yeshúa expresó lo que Dios quiso decir al decir HACIENDO lo que Su ley dice. En Mizmor 40:8 leemos, "El hacer tu voluntad, Dios mío, me ha agradado, y tu ley está en medio de mi corazón." Yeshúa siempre hizo lo que su Padre Le dijo. Él siempre obedeció la Torá. Por esto el nuevo nacimiento o nuevo corazón tiene la Torá en mente. Escuchen cuidadosamente a Yechezk'el (Ezequiel) en el capítulo 36:26-27. "Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra." Por esta razón es el corazón quien es la fuente de verdadera circuncisión (D'varim30:6, Yirmeyahu (Jeremías) 4:4). Cuando el corazón es circuncidado, es hecho limpio por la palabra de Dios. Es solamente entonces que el hombre puede decirle no al pecado. "En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti." Mizmor 119:11

Así es que el arca tiene que ser construido primero. Será el centro y corazón del tabernáculo. El corazón del Mishkan tiene que ser una unidad. Esta única estructura tiene que ser la unidad de la misericordia y la Torá de Dios. La Torá sin la misericordia es muerta. No puede estar sola y no hay otra compañera para ella. Piensen en eso. Si Adán (la Torá) no tuviera compañera, entonces ¿cómo podría multiplicarse? ¿Cómo pudiera fluir la vida de él? La Misericordia sin la Torá está vacía. Si Chava (Misericordia) no tuviera semilla, no habría fuente de germinación, entonces ¿cómo podría producir vida? La verdadera gracia está llena con la semilla de vida. "... las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida." (Yochanan 6:63). El testimonio o testigo del arca tiene que ser el mismo testigo de Yeshúa. El mismo testimonio o "buenas nuevas" a ser enseñadas y observadas por el pueblo de Dios a través de las generaciones. El testimonio del Padre, heredadas por Su Hijo, para ser dadas a Sus hijos. "Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén." (Mattityahu 28:20)

¡Shalom alecheim!